martes, 15 de octubre de 2019

EL REPORTAJE EN LA RADIO

El reportaje es un modelo de representación de la realidad que a partir del monólogo radiofónico persigue narrar y describir hechos y acciones de interés para el oyente, proporcionándole un contexto de interpretación amplio en los contenidos y un uso de fuentes variado y creativo. Como la mayor parte de los textos audiovisuales, se estructura en tres partes: apertura, desarrollo y cierre. El objetivo de este artículo es describir la función y los requisitos que le corresponden a cada una de estas partes y exponer también los diferentes tipos de aperturas, desarrollos y cierres con los que se pueden construir reportajes en radio.


1) El reportaje es un género libre, flexible y muy sujeto al tema y a la creatividad del autor
2) Esta libertad se extiende también a las diversas posibilidades de estructurar el texto
3) Aún así, como en cualquier narración, en general existen tres partes mínimas bien diferenciadas: apertura, desarrollo y cierre
4) Aunque estas partes pueden recibir distintos nombres, les corresponden siempre funciones similares:
a. A la apertura la de centrar el tema y captar la atención del oyente para que escuche el resto de la emisión
b. El desarrollo es la parte más extensa y completa, y la que proporciona el grueso de los elementos del contenido, sustenta el enfoque, desarrolla los argumentos, concatena las narraciones y aporta los principales datos, ideas e interpretaciones surgidas de la investigación
c. El cierre es la parte final y la que refuerza la idea principal2
Veamos ahora más en detalle en qué consiste cada una de estas partes y qué diferentes opciones existen para elaborarlas.


APERTURA
Supone una primera toma de contacto con la audiencia, a la que hay que descubrir el escenario de los hechos y la motivación que ha llevado al reportero hasta allí.


En este sentido, toda apertura tiene siempre dos cometidos: reclamar la atención del oyente y prepararle antes de ofrecer el dato fundamental de la historia. Esta preparación se refiere al tema del reportaje, pero también a su propósito y enfoque. Puesto que se trata de la primera toma de contacto con el receptor, se exige claridad de ideas y exposición precisa del tema y el enfoque del reportaje.


La apertura de un reportaje en radio debe cumplir los siguientes requisitos:


1) Sencillez: de manera que los oyentes la pueden entender, lejos de artificios estéticos que pueden resultar confusos
2) Relevancia temática: la entrada debe capturar la esencia temática del reportaje, ni más ni menos. Si es una anécdota, está debe ilustrar el tema principal y no sólo una parte o incluso contradecirlo
3) Interés intrínseco: la magia de iniciar con "casos de la vida real", por ejemplo, no garantiza una buena entrada. Los personajes de la vida real son aburridos, y suelen decir cosas aburridas. Si el reportero no tiene una anécdota interesante, es mejor que utilice otro tipo de entrada
4) Color: se busca un lenguaje distinto, colorista pero, a la vez, sencillo y claro. Se trata de descubrir la originalidad no sólo en el tema, el propósito o el enfoque, sino también a través del lenguaje empleado.
5) Intriga: la apertura debe ser llamativa pero no caer en el error de contar los datos principales. Lo más adecuado es ir dosificándolos a lo largo del texto para evitar que la tensión se concentre tan sólo en un parte. Dicho de otra forma: el reportaje debe generar expectación pero no resolverla.


1) Plantear un aspecto novedoso no divulgado antes
a. En este caso la apertura es parecida a una entrada de noticia, con la diferencia de que lo que se resume no es un hecho individual, sino una situación
b. Resulta adecuada cuando nuestro trabajo conduce a una revelación, a descubrir algo importante que estaba oculto o que no se conocía
2) Plantear un enfoque original sobre algo conocido
a. Lo nuevo aquí no es lo que se da a conocer sino la interpretación sobre hechos ya conocidos: decir qué significan, en dónde residen sus causas, qué proyecciones o repercusiones podrán tener, cuál podría ser su desarrollo, etc.
3) Buscar la novedad y el interés mediante el detalle o el estilo
a. En este caso, la entrada pretende llamar la atención
b. Es propia de aquellos reportajes complejos en los que los hechos fundamentales no se pueden resumir y también de aquellos que contienen elementos específicos capaces de atraer a la audiencia.


TIPOS DE APERTURA


La apertura de resumen
Es similar a una entrada de noticia. Resume la esencia del texto de manera informativa. Es relativamente previsible y, en principio, no es la apertura más recomendable por su gran parecido con la noticia. Lo mejor es utilizarla como última posibilidad.


La apertura de sumario
Es una relación de hechos o elementos distintos. Como cualquier sumario, contiene en su interior una relación de los diferentes elementos del reportaje. En este caso, se trata de una lista o secuencia de puntos que, en conjunto, dan idea de las facetas del reportaje. Suele ser, por tanto, una enumeración.


La apertura narrativa
Apela al relato como gancho del texto. En estas aperturas se debe tener especial cuidado no sólo de seleccionar muy bien lo que se va narrar sino también de cuidar la forma en que se hará. En este sentido, los ritmos, el vocabulario, la extensión de las frases son elementos fundamentales. Es imprescindible, además, que el relato guarde relación directa con el tema del reportaje o que, al menos, ejemplifique un aspecto interesante de éste. Para ello, el periodista puede utilizar diversas referencias sensoriales, sonoras, visuales y olfativas. En la práctica, es un tipo de apertura bastante empleada.


La apertura de cita
Utiliza palabras textuales de alguna fuente personal con la intención de provocar sorpresa e interés en la audiencia. En radio, dada la preferencia del reportaje por los sonidos diegéticos, propios de la realidad, esta apertura suele incluir la cita en estilo directo. Es decir, suele ser el testigo, afectado o experto el que presenta su declaración con sus propias palabras. En este sentido, es un tipo de apertura que tiene más fuerza y credibilidad en radio que en prensa. Es posible que esta razón explique también la mayor frecuencia de estas aperturas en los reportajes en radio. No obstante, tampoco conviene abusar de ellas.


Su incorporación, por tanto, debe estar justificada y conviene tomar una serie de precauciones:
1) Procurar que la declaración no sea tan parcial que, al colocarla al comienzo, distorsione el sentido general del reportaje. Por ejemplo, si es un tema polémico, citar a una sola de las partes significaría tomar partido. O si el personaje no es trascendente en el texto, le estaremos otorgando demasiada importancia.
2) Intentar también que la cita tenga alguna originalidad y atractivo, ya sea por sus conceptos o por su vocabulario. Y debemos estar seguros de que nosotros no podemos componer algo mejor.
3) Evitar los párrafos interminables, la sintaxis rebuscada y el vocabulario complejo. Además, la cita deberá ser corta y tener sentido por sí misma. Por el contrario, la cita bibliografía demasiado larga resta fuerza a este tipo de apertura.


DESARROLLO
Considerado el cuerpo, la médula y el esqueleto del reportaje, se trata de la parte más extensa y la que contiene la mayor cantidad de información. En ella "se proporciona el grueso de los elementos del contenido, se sustenta el enfoque, se desarrollan los argumentos, se concatenan las narraciones y se aportan los principales datos, ideas e interpretaciones surgidos de la investigación periodística"


CIERRE
Es la parte final del reportaje, el "broche de oro" con que se cierra y que hace sentir al oyente que no faltó nada importante por tratar (Leñero y Marín, 1986: 216). El hecho de que vaya al final no justifica que tenga una importancia menor y que, por tanto, se pueda descuidar. Más bien al contrario, al ser la radio un medio efímero, en el que el oyente no suele contar con la posibilidad de volver hacia atrás, siempre tenderá a recordar lo último que se le cuente. Por eso, su elaboración requiere un cuidado especial ya que "la frase que cierra un reportaje (…) adquiere el valor de las especias en cualquier condimento: es el sabor que permanece en el paladar unos segundos". De ahí que no baste con "colgar" el texto o terminarlo de manera precipitada. El oyente debe tener la sensación de que el reportaje ha terminado, le ha llevado a una conclusión.


REQUISITOS PARA EL CIERRE


1) breve: no puede ser demasiado extenso, no es el momento para añadir nuevos datos puesto que el cierre cumple también una función de redundancia.
2) concluyente: debe ser el final lógico del camino y proporcionarnos la conclusión, la demostración de la tesis de partida, el colofón final, el desenlace de la trama. La respuesta a la pregunta planteada en la apertura, la idea con que el reportero necesita que al final retenga la audiencia.

3) paulatino: debe mantener una ligazón con la última parte del desarrollo; es decir, el oyente no debe percibir un salto brusco, un cambio radical, se debe introducir de manera suave para que quede natural.
4) original: como corresponde a un texto que tiene en la originalidad uno de sus rasgos más específicos. Esto excluye el cierre precipitado, brusco o demasiado escueto
5) lógico y congruente con el texto que corona.



REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS.
BENAVIDES, José Luis y QUINTERO, Carlos (2004): Escribir en prensa, Pearson, Prentice Hall, Madrid.
CEBRIÁN HERREROS, Mariano (1992): Géneros informativos audiovisuales: radio, televisión, periodismo gráfico, cine, vídeo, Ciencia 3, Madrid.
DEL RÍO, Julio (1994): Periodismo interpretativo. El reportaje, Trillas, México.
ECHEVERRÍA, Begoña (1998): Las ws del reportaje, Fundación Universitaria San Pablo CEU, Valencia.
FAUS, Ángel (1974 y 1981): La radio: introducción a un medio desconocido, Latina Universitaria, Madrid.
FERNÁNDEZ PARRAT, Sonia (2003): Introducción al reportaje: antecedentes, actualidad y perspectivas, Universidad de Santiago de Compostela, Coruña.
GARCÍA JIMÉNEZ, Jesús (1996): Narrativa audiovisual, Cátedra, Madrid.
GRIJELMO, Álex (1997): El estilo del periodista, Grupo Santillana de ediciones, Madrid.

GUTIÉRREZ, María y PERONA, Juan José (2002): Teoría y técnica del lenguaje radiofónica, Bosch Comunicación, Barcelona.
IBARROLA, Javier J. (1994): El reportaje, Gernika, México.
LEÑERO, Vicente y MARÍN, Carlos (1986): Manual de periodismo, Grijalbo, México.
MARTÍNEZ-COSTA, María Pilar y DIEZ UNZUETA, José Ramón. (2005): Lenguaje, géneros y programas de radio, Eunsa, Pamplona.
MARTÍNEZ-COSTA, María Pilar (2002): "El proceso de escritura de la información radiofónica", en MARTÍNEZ-COSTA, María Pilar (coord.): Información radiofónica. Cómo contar noticias en la radio hoy, Ariel Comunicación, Pamplona, pp. 97-119.
MERAYO, Arturo (1992): Para entender la radio. Estructura del proceso informativo radiofónico, Publicaciones Universidad Pontificia de Salamanca, Salamanca, 1ª edición
MERAYO, Arturo (2001): Curso práctico de técnicas de comunicación oral, Tecnos, Madrid, 2ª edición.
MERAYO, Arturo (2000): Para entender la radio, Publicaciones Universidad Pontificia de Salamanca, Salamanca, 2ª edición.
MUÑOZ, Juan José y GIL, César (1994): La radio: teoría y práctica, Instituto Oficial de Radio y Televisión, Madrid, 2ª edición.
RODERO, Emma (2001): Manual práctico para la realización de entrevistas y reportajes en la radio, Librería Cervantes, Salamanca.
ULIBARRI, Eduardo (1994): Idea y vida del reportaje, Trillas, México.

No hay comentarios:

Publicar un comentario